FRACTUS Santander - FORO GUANENTÁ

La importancia central radica en que estas prácticas benefician a toda una comunidad; no solo a la comunidad académica o estudiantil de una institución sino a toda la población de una misma sociedad. Así, esto le da un valor importante al currículo ya que se va de lo teórico a lo práctico dándole un significado más real y tangible a los estudiantes y actores activos de cada proyecto de sus logros como sociedad y como entes transformadores de cambio dentro de aquella misma.

El valor formativo que proporciona la IEP al currículo radica en el desarrollo de habilidades cognitivas, tecnológicas y sociales en los estudiantes, además de echar una mirada crítica al entorno para identificar necesidades que se puedan resolver mediante el trabajo cooperativo y reflexivo.

Las prácticas curriculares de apropiación social ofrecen métodos de enseñanza activos, reflexivos y colaborativos que generan la posibilidad de desarrollar potencialidades comunicativas, relaciones sociales, posibilita la participación con sentido crítico de la sociedad y conlleva al desarrollo de potencialidades, capacidades y habilidades para resolver los problemas propios y de la comunidad.