Los procesos de investigación identifican problemas del contexto social y buscan dar solución a estas situaciones a través de una serie de actividades prácticas que contribuyan en el mejoramiento de la realidad. Además se pueden obtener beneficios adicionales en estos procesos, como pueden ser los incentivos económicos para los participantes. Pequeñas acciones contribuyen a mejorar el mundo.
La investigación vincula a todos los actores de la comunidad educativa, dándole vital importancia a la participación y el trabajo colaborativo, donde se asignan responsabilidades y se construye un saber, además de dar solución a una pregunta problematizadora o un problema del contexto local.